jueves, 29 de mayo de 2008

Fantasmas.

Desde que el hombre se considera como tal ha respetado a sus antepasados muertos, les ha llegado a rendir culto y a contactar con ellos para pedir consejo o ayuda. La mayoría de las tribus norteamericanas consideran sagrada la tierra de sus antepasados, la religión del antiguo Egipto estaba centrada en el tema de la muerte, incluso algunas culturas enterraban a sus parientes en la pared de su casa para que les resguardara. Muy pocas sociedades no realizan ceremonias funerarias, generalmente para mantener al fallecido contento en cualquier sentido, y evitar que no pueda llegar al otro mundo o que regrese.
Actualmente estamos algo más acostumbrados a escuchar historias sobre todo tipo de fenómenos paranormales, aunque aquellos que las viven no los terminan de olvidar. Hay manifestaciones de muchas clases, ya nadie creería en un fantasma ataviado con una sábana y unas cadenas. Estos suelen revelarse más por sus efectos secundarios que por una visión estremecedora.

Los denominados poltergeist, por ejemplo, se caracterizan por su habilidad para irritar a los que los sufren, suelen manifestarse moviendo objetos, escondiéndolos, dejando caer cosas, volcándolas o, en casos extremos, haciéndolas flotar. Una manera de saber si un objeto ha sido manejado por un fantasma es que suele estar caliente. El doctor Hans Bender logró rodar casi un minuto de película de un efecto poltergeist real ocurrido en Alemania, donde se ven volar y desplazarse objetos.

Otras entidades se manifiestan de maneras menos escandalosas, aunque no menos preocupantes, como en el caso de las caras de Belmez, en el que no se pudo hallar explicación a la aparición reiterada de dibujos de caras en el suelo y paredes. También son típicos los focos de frío o calor, o malos olores que aparecen sin una explicación racional y que desaparecen tan misteriosamente como llegaron, o incluso descargas eléctricas.
Por supuesto también están las apariciones de personas o cosas, generalmente en fotografías o vídeos, así como las psicofonías, en las que el/los entes se revelan "en diferido". Los mensajes suelen ser ruidos humanos (lloros, quejidos...), o una frase que se repite, aunque no faltan los mensajes dirigidos al investigador (desde consejos hasta amenazas), por eso más que aconsejar se prohibe a personas que no estén psicológicamente preparadas que realicen este tipo de prácticas. Mediante cámaras de vídeo también se han captado entidades, incluso a veces con sonido si se combina con una grabadora, ya sea en tomas realizadas por casualidad o en circuitos cerrados de televisión (enfocando la cámara a la televisión en la que se emite lo que se grava), en los que en apenas unos fotogramas entre la estática se han descubierto imágenes fijas o en movimiento de seres fallecidos. De esta manera se captó un mensaje de Constantin Raudive, padre de las psicofonías; con el vídeo se captó su imagen, y con la grabadora el siguiente mensaje:

"Un sustrato inmaterial, cualquiera que sea el nombre que le deis, principio, alma o espíritu, es una parcela de eternidad, escapa a la destrucción... (ruidos). desgraciadamente hoy la gente tiene miedo a morir, pero la muerte no es temible. La enfermedad es temible. Y lo que precede a la muerte. La muerte desemboca en una eternidad radiante, es una liberación que pone fin a nuestras tragedias"

Si lo que desea es encontrarse con un fenómeno paranormal del tipo manifestación, debe saber que los mejores sitios son los lugares antiguos como casas viejas, teatros o cementerios, teniendo siempre en cuenta el carácter privado de estos lugares y el respeto que se merecen.

La mejor hora para recoger este tipo de experiencias son las primeras de la mañana (las 8 o las 9) en las que seremos menos propensos a dejarnos llevar por la imaginación y los ruidos naturales (crujidos o dilataciones de las estructuras, animales nocturnos...).

Si se ve algo por el rabillo del ojo se debe evitar girarse para mirarlo directamente, ya que entonces dejaremos de verlo. Por ello debemos usar la visión periférica, dejar que el objeto se introduzca en nuestro campo de visión. Siempre es aconsejable ir acompañado, y bien equipado. Se debe llevar una cámara con luz ténue o película infrarroja si deseamos tener pruebas. Lo mejor es usar una cámara de vídeo, ya que así evitamos que una mancha en el revelado nos dé que pensar, también evitaremos así enfocarlos directamente (usando la visión periférica con la cámara). También se debe llevar un termómetro digital para registrar los cambios inusuales de temperatura. Los profesionales, entre otras cosas, disponen de un detector electromagnético que capta señales de energía no producidas por aparatos corrientes (electrodomésticos, etc.) .

Uno de los casos más recientes de fantasmas aparecidos en vídeo es el que aparece en la película "Tres hombres y un bebé", que no fueron hechos públicos hasta meses después de que apareciera en vídeo. Se dice que la casa en la que se rodó, un niño había sido asesinado con una escopeta.
En la primera imagen se ve en la ventana, del fondo una escopeta que por supuesto no estaba allí. En la segunda y tercera, también al fondo en la misma ventana, y mientras los actores realizan su trabajo en una escena de unos 20 segundos, la escopeta ha desaparecido y ahora por la ventana se asoma un niño que desde luego tampoco estaba allí.

Así pues, parece ser que los fantasmas existen. Hay quienes los han visto y quienes los han sufrido, y otros que no se creen ni lo uno ni lo otro.


Texto extraído de "http://www.formarse.com.ar/paranormal/fantasmas.htm"

miércoles, 28 de mayo de 2008

Dos noticias... cachondas.

Sí.
Estas cosas pasan.
Y sabéis que no puedo ignorarlas.
Por ello, quiero compartir mi sufrimiento con vosotros, dejando aquí un par de noticias de las que a mi me suelen gustar... Sinceramente, encontrar sucesos de este tipo debe ser toda una inspiración para los estudiantes de periodismo:


MUJER DESAFIÓ DESNUDA A LOS OBREROS NEOZELANDESES QUE LE SILBARON






Wellington, 23/05/08-


Una turista israelí se desnudó frente a un cajero automático en Nueva Zelanda, sacó dinero y se volvió a vestir, bajo la mirada atónita de obreros que asfaltaban una calle, informó ayer la prensa local. La mujer dijo a la policía que estaba harta de los silbidos de los hombres en la vía y actuó de ese modo porque los trabajadores la estaban molestando. En un breve contacto con periodistas, el sargento Peter Masters declaró que la visitante extranjera tuvo un comportamiento inapropiado, lo cual se le explicó y señaló en la Estación. La israelita, que este jueves prevé abandonar Nueva Zelanda, señaló que en el momento en que los hombres comenzaron a silbar, pensó: "al diablo con ellos, les mostraré lo que tengo y se pierden". Masters corroboró que se trata de una mujer muy atractiva. (PL)

(madriddigital.info)

UN HOMBRE "JUEGA" A INFLAR A SU HIJO CON LA BOMBA PARA LOS NEUMÁTICOS

El individuo, un mecánico camboyano, se justificó de este modo después de que el niño tuviera que ser hospitalizado por problemas de estómago. Tuvo la 'genial' ocurrencia de insertar en la boca de su hijo, un niño de cinco años, el tubo de la bomba para los neumáticos para tratar de inflarlo.


Según informaba el diario Rasmei Kampuchea (y recogía la web int.iol.co), Try Sienghym "estaba jugando" con su hijo, Sok Cambo. Sin embargo, el juego le salió mal y el niño tuvo que ser trasladado al hospital donde fue estabilizado después de que su estómago sufriera distensiones debido a la acción del aire en la cavidad intestinal.
Según fuentes cercanas a la familia, el padre, al menos, se "arrepiente mucho de haber jugado así con la vida de su hijo". La policía del país asiático ha decidido que no tomará medidas contra el hombre, y responsabiliza del acto a la "pura estupidez, contra la cual no existe ley".


(cadenaser.com)


PD: obviamente, el dibujo del niño-globo no estaba en la noticia original, es una manipulación mía... No es el caso de la foto de la moza.

martes, 27 de mayo de 2008

Madurar.

Hay veces que debes aprender a hacerte viejo. Aprender a vivir con fantasmas del pasado, errores no enmendados, viejos amigos que no compartieron tu destino, hechos que pasaron en su momento, dejando una honda cicatriz en tu corazón…

El sentimiento que recorre el cuerpo al hacer recuento, en ocasiones, apenas dista de un amargo sabor a derrota y final. Sabiendo que todo tiempo pasado fue mejor... y que el evolucionar no será más que un paso menos a un final del que no se vuelve.

Recuerdas un viejo amigo de la infancia, que desapareció de tu historia. U otro, que finalizó su vida en una odiosa coincidencia. O algunos, que más lejanos, acaban convirtiéndose en sombras de lo que fueron. E incluso aquellos que aún no han dejado de persistir, algún día, la fortuna no lo quiera, pueden acabar por ser una foto en blanco y negro más. Una vida pasada hace demasiado. Una mota quizá, en el eterno tapiz de la existencia.

Sea como sea, ya no son tuyos. Sintiéndote como un niño que abandona juguetes o como el juguete olvidado, gente que considerabas tu confianza, acaban lejos de ti aunque estén a tu lado. Y los que lejos se hallan, desapareciendo de tu vida para volver solo en aquellos momentos cuando recuerdas una anécdota de infancia o de juventud, haciendo que te preguntes dónde estarán ahora... Para sorprenderte leyendo que quizás formaron una familia, pero que no les fue del todo bien. U otros, que libres como eran, dejaron su existencia allá donde mueren las cenizas de un cigarro.

Nunca aprendes a olvidarlos… aprendes a vivir con ellos en tu conciencia. Repitiendote lo diferente que podía haber sido todo de haberse producido otra posibilidad, otra variable, otro nudo en el camino. Y despertando cada noche, recordando aquellos rostros que una vez fueron tus confidentes... para descubrir que en la oscuridad, lo has perdido todo.

Después de todo, eso es hacerse mayor, ¿no?

lunes, 26 de mayo de 2008

Doña Berenguela


Hoy he decidido compartir una de tantas leyendas de la mitología popular de mi tierra gallega que por desgracia, pocos gallegos conocen ya. Con ese fin he decidido rebuscar en este basto imaginario y rescatar algún cuento de los que nadan ya en el fondo del baúl y sacarlo a la superficie.

Cuenta una leyenda que hubo una vez en el Reino de Galicia una reina incomparable en belleza llamada Berenguela. Su hermosura iba mucho más allá del aspecto físico, y el amor que profesaba por la ciudad de Compostela era aún mayor que el que con sus gestos despertaba en sus súbditos. Solía vestir ropas sencillas para mezclarse con los aldeanos y deambular por las calles empedradas alrededor de la Catedral, empapándose de la vida diaria de la gente, ayudando al pobre y aprendiendo a su marido cómo ser un buen rey que supiese escuchar las necesidades de su pueblo.

Sin embargo la muerte llegó temprana a llamar a su puerta, y Berenguela conservaba la belleza de su juventud cuando llegó a las puertas del cielo. Sus ojos empañados en lágrimas por verse lejos de su amada Compostela conmovieron al Señor, que le preguntó si no estaba feliz de encontrarse allí arriba, en el paraíso.

- Oh, sí, mi Señor. Pero echo de menos mi Compostela. Si tan solo pudiese verla una vez más…
Él, compadecido, decidió concederle la oportunidad de descender a la ciudad y caminar entre sus gentes cada 24 de julio en la Noche Grande, víspera de la festividad de Santiago. Así mismo, su eterna belleza sería contagiada a toda muchacha compostelana con la que Berenguela se cruzase en el camino durante su paseo nocturno.

Así que, según la leyenda, si tenéis la oportunidad de viajar a Santiago de Compostela en la celebración de la Noche Grande, tendréis la oportunidad de disfrutar de la belleza que la reina deja a su paso en los rostros de las jóvenes santiaguesas.

miércoles, 21 de mayo de 2008

Anécdota que rima... a veces




LA PUTA DE BABILONIA


Oh, tú, Querido Lector
que lees estos pseudo-versos,
¡he de advertirte! Esto no es calidad,
yo no soy uno de esos.

¡Frena tu lengua!
¡Esto no es un poema!
¡Es un fallo gramatical!
¡Y no es ningún problema!

Te ofrezco una anécdota, una diversión,
un divertimento, no una magna creación.
Relájate, relájate, no hay por que tener el culo agachado,
si te apetece leer verdadera poesía, feliz te recomiendo a Machado.

...


Sevilla, tarde, puente sobre el río,
lugar perfecto para fotos y pasiones,
siempre que puedas ignorar el ruido
de motos, coches y camiones.

Comen helado, miran mapas, señalan con el dedo:
los guiris explotan la situación.
Sus cámaras roban las almas
de buena parte de la población.

Dos de ellos me llaman la atención,
chico y chica, blancos inmaculados,
apoyándose en la barandilla,
dándose el lote, bien concentrados.

Al pasar a su lado, ella me mira,
empuja atrás a su amado amante
y, con acento tejano, sonríe
mientras dice "¡Hola, Caminante!"

Extiende el brazo, su mano,
me ofrece un papel, un folleto.
Me incomoda detener su faena,
así que, rápidamente, pillo el panfleto.

¡Santa Virgen! Esto si que no me lo espero:
"¿Crees en Dios?, ¿Quieres conocer el camino?,
¿Quieres saber cuál es tu verdadero destino?"
Miro atrás, ahí siguen, con su tema y con esmero.
Imposible. No creo ¡Qué delicia!
Blancos inmaculados.
¡Genial!, ¡Mormones!, ¡Qué malicia!
Ahí, bien concentrados.
¡Sí, Señor! Difundiendo la buena palabra de su profeta
mientras el diablillo le agarraba bien su santísima teta.

Toda una experta, veo, en estas ceremonias.
Más profesional que la Puta de Babilonia.
Misionera de Moroni, en dulce labor,
si así captas adeptos, ¡cáptame, por favor!

Retrato de una estampa del pasado.

La luz de una chimenea apagada muchos años atrás iluminaba la limpieza de los polvorientos suelos de la estancia. Libros convertidos en trozos de comida para las ratas y estantes presa de la carcoma decoraban la habitación, adornada también con viejos retratos de personas que hacía mucho que no pisaban esos suelos. Los cristales de la casa, recubiertos de mugre, ya no dejaban ver lo que se hallaba en el exterior. Y frente a la chimenea, un viejo sillón de orejas, que antaño había cobrado un color rojizo, esperaba aún que su dueño volviera a reposar en él, aunque los muelles sobresaliendo del lugar donde el cuerpo debía descansar asomaran. Los bustos de la habitación, tenían un recubrimiento de moho, e incluso del techo, en algúna que otra gotera asomaba un rastro de plantas que solo Dios sabría como habían llegado ahí... Y en una pared, un grabado con una frase de una antigua película rezaba:



“¿Qué es un fantasma? Una tragedia condenada a repetirse una y otra vez. Un instante de dolor quizá. Algo muerto que aparenta estar vivo. Una emoción suspendida en el tiempo. Como una fotografía borrosa. Como un insecto atrapado en ambar.”



En el fondo no era más que una vieja habitación. Con su propietario olvidado en el tiempo.

martes, 20 de mayo de 2008

Lucha, Camille, lucha


Un gran ventanal dejaba pasar luz al estudio, amplio en su mediocridad, pequeño en la grandeza que habría debido albergar. Un rostro en el que los problemas y no la edad comenzaban a esculpir arrugas se deja ver por la luz, mirando el exterior con la profundidad de sus ojos ahogados en la soledad. Sus dedos se movían inquietos, retorciéndose alrededor del aire viciado de aquel taller.

“Mi amada Camille:
Me es imposible contar las horas que paso sin verte, pues cada segundo en tu ausencia es una vida de tortura que aprisiona mi alma. El recuerdo de tu olor nubla mis pensamientos día y noche, y no encuentro el candor de tu piel en el cuerpo que comparte mi cama.”

Abandonó el umbral de la ventana y se posicionó ante una nueva mole de barro humedecido. Sus manos agitadas lo manipularon con frenesí mientras la materia cambiaba a su capricho bailando entre sus dedos. Sus ojos parecían brillar entre los mechones despeinados de pelo rizo que caían sobre su frente.

“Mi vida lejos de ti es un encierro y la llama que antaño me unió a Rose fue arrasada por el fuego que desataron tus brazos en mi interior. La pasión irrefrenable que nos consume por dentro nos ha llevado a un error que podría echar por tierra lo que hasta ahora empezábamos a construir.”

Sus dedos se hundían en la arcilla y la acariciaban creando formas bajo sus yemas. Una forma ovalada, pequeña y delicada tomó textura entre dos mejillas, una pequeña naricita, unos párpados erguidos que dejaban ver la insípida avidez de una mirada natal. Las manos seguían esculpiendo el menudo cuerpo con enfermiza habilidad.

“Ese bebé que crece en tus entrañas es un deseado engaño que ha surgido en el momento más inoportuno. Nada desearía más que poder darte un lugar en mi lecho y un dominio en mi hogar, y que ese fruto de nuestro amor creciese con el apellido del padre que lo ama sin verlo entre sus brazos. Pero no podrá hacerse real si nos adelantamos al momento.”

El rostro de un niño sonriente, sus manos inquietas y su cuerpecito lleno de vida se dejaron pulir por unos dedos que mimaban la arcilla convirtiéndola en la piel suave y real del pequeño. Terminada su obra se retrasó y la miró permitiendo que una fugaz ternura franqueara la infinita tristeza de su mirada.

“El nacimiento de ese niño hoy no sería si no el obstáculo definitivo a nuestro amor, pues los cimientos del futuro que juntos construiremos se habrán de ver amenazados por la infelicidad entre la que nuestro hijo crecerá por su condición de bastardo a ojos de los demás. No puedo permitir que eso empañe nuestra felicidad.”

Sus ojos vagaron por las demás esculturas que se apilaban en las mesas. El barro fresco todavía formaba decenas de rostros infantiles que la miraban sonrientes esperando sus caricias maternales.
Se apoyó en el borde de la mesa y algo crujió bajo sus manos. El arrugado papel de una carta en la que las letras se habían desvaído con la tinta invisible de las lágrimas se resintió del peso de su extremidad. Su sólo tacto le provocó temblor, y a sus pupilas regresó la agonía. Los labios le temblaron y trató de contenerlo en un mordisco.


“ Sé que será doloroso, y compartiré esa pena contigo hasta que pueda al fin esperarte en el altar para curar todas las noches de soledad que ambos hemos sufrido, y dejar que nuestros espíritus prisioneros renazcan libres el uno al lado del otro. Deja que mis consejos te guíen hasta nuestra felicidad, un deseo que anhelo cada instante con la fuerza que tu recuerdo me inspira a poseer.
Eternamente tuyo, Auguste Rodin.”

Sus dientes se clavaron demasiado en el labio y un fino hilo de sangre brotó. Se llevó las manos a la boca rozándose la herida. El tremor se contagió descontrolado a sus dedos y los párpados se agitaron desbordando la epilepsia que la acongojaba.


Abandonada la razón, rompió y despedazó aquella carta en un grito de rabia. Su puño pesado cayó sobre el arenoso rostro angelical de la escultura que acababa de construir, destruyéndola por completo. Fuera de sí, enterró las manos en ella desformando la materia formada, como queriendo desintegrar el barro, la esencia de aquella vida inerte que había creado, arrebatando aquella luz que no había llegado a fraguarse. Extendió su destrucción entre los gritos de su propia desesperación a todas las esculturas que la rodeaban, mientras los fragmentos de sus niños, de sus propios demonios, caían desfigurados y desmigajados a su alrededor.

En memoria de Camille Claudel. Lucha, Camille, lucha.

miércoles, 14 de mayo de 2008

La Triste Historia de Little John: The Movie


Los rumores se han confirmado. Uno de los mayores secretos de la industria del cine contemporáneo ha sido revelado en exclusiva para nuestros queridos lectores:


Clint Eastwood ha adquirido los derechos de la aclamada novela “La Triste Historia de Little John”. El prestigioso actor y director (entre otros oficios que domina) confesó la semana pasada a LOS PIES FRÍOS estar enamorado de esa historia y de sus enormes posibilidades cinematográficas. Según sus declaraciones, inmediatamente después de leerla se puso a co-escribir el guión junto al también director y guionista David Koepp (escritor de “La Habitación del Pánico”).

Poco se sabe sobre el reparto. Los rumores hablan de que los dos tertulianos del ya famoso Toy Place Pub serán interpretados por Kris Kristofferson (“Pat Garret y Billy the Kid”, “I’m not there” – en la foto de arriba) y Willem Dafoe, siendo el primero el narrador principal de la historia.
Para encarnar al personaje central, Little John, se barajan actores de la talla de Steve Buscemi (“Reservoir Dogs”, “Fargo”), Ethan Hawke (“Training Day”, “Gattaca”) o Cillian Murphy (“28 Días Después”, “El Viento que Agita la Cebada”), pero hasta ahora son todo habladurías.
El director también ha explicado que el resto de personajes, anónimos en la novela, serán bautizados en el filme y tendrán mayor protagonismo para darle más peso al guión.
Cuando se le preguntó por la fecha de estreno, no supo contestar. Se limitó a decir “para Abril de dos mil y algo…”



(Recordamos a nuestros lectores que pueden leer la novela corta en cuestión haciendo clic en la Etiqueta “La Triste Historia de Little John”, al final de este texto o en el Catálogo de Etiquetas de la columna de la derecha)

martes, 13 de mayo de 2008

Dos jokers.






“En unos pocos meses he descubierto el apego, cariño y amor. Apego a un conocido al principio, cariño a un amigo más tarde, y amor a un hermano finalmente. Es increíble que en lo que algunos llamarían casualidades –yo lo llamo destino en conjunto con la diosa fortuna- puedas encontrar almas tan afines y distintas a la par. Complementarias como la noche y el día. Los cuales nunca dejan de relevarse. Dos maneras tan diferentes de asumir e interpretar la vida y que sin embargo son capaces de comprender la otra mirada aunque nunca sean capaces de compartirla.

Juntos conforman un tandem letal. Una dupla peligrosa como el arco y la flecha o como la lanza y el escudo. Uno soñador, romántico empedernido, a veces escaparate de la imagen del bufón perdedor que tantas buenas historias da… el otro, realista en exceso, trascendental y trágico, y a la vez fuerte en las situaciones críticas… Ambos capaces de ser sutiles y bruscos si la situación lo requiere.

Dos tramposos a ojos ajenos cuando solo son dos magos con muchos ases en la manga y un comodín en el bolsillo. Honorables en su código no comprendido por sus iguales… excepto por ellos. Los dos jokers de la baraja… capaces de dar victorias y derrotas… pero sin los cuales el juego de la vida no sería tan trágica.

Ni divertida.”









Dedicado a mi Hermano.

Harkuril.

lunes, 12 de mayo de 2008

Querida tú:




Lunes 12 de mayo de 2008


Querida tú:

Hoy ha sido un día duro. No has dejado de tocarme las fibras con tus problemas y tus absurdos miedos. Amarillas me tienes las hojas de tanto llorar y tanto lamentarte. ¡Como si no estuviera yo suficientemente rayado! A ver si un día de éstos me sorprendes contándome el último ligue que te has perdido por estar borracha, que así al menos me puedo reír de vez en cuando.


Fdo: Tu diario.

PD: A ver si usamos los bic de toda la vida que la pijada esa de los Pilot rascan un huevo.

domingo, 11 de mayo de 2008

Calma

El día había empezado soleado. Una de estas mañanas en las que uno tiene la sensación de que tal vez la luz pueda penetrar bajo la piel y limpiar la suciedad del corazón. Con esa esperanza, ella cogió su abrigo y salió al encuentro con el sol. Se dejó pasear sin rumbo fijo buscando la comodidad de la hierba si podía evitar el duro asfalto, mientras la brisa le revolvía los cabellos mezclándose con ellos a capricho. A medida que avanzaba el cielo se fue nublando y las oscuras nubes que se cernían sobre su cabeza instauraron la inquietud de sus sombras en su interior. A cada paso la hierba parecía perder la vivacidad de su color verde bajo aquel manto tormentoso.
El camino desapareció entre los brazos de la naturaleza más agreste, y sus pies se vieron obligados a sortear las zarzas y ortigas que crecían salvajes. La maleza crecía en altura a medida que avanzaba y a lo lejos retumbaban ya los primeros truenos de la tormenta. Su inquietud creció hasta rozar los límites de la angustia cuando en el horizonte, algo plateado brilló. Aún con los pies arañados y lastimados por las piedras del camino, continuó adelante embriagada por aquella nueva luz que competía con la oscuridad de la tormenta.
La tierra terminó bruscamente en una pared vertical donde la roca se había convertido en un lienzo sobre el que el mar pintaba sus excentricidades a placer. Bajó la vista y contempló embelesada el reflejo del resplandor de la tarde sobre la superficie del agua. Estaba maravillosamente tranquila, allá abajo, meciéndose suavemente sobre las rocas. Casi parecía bailar un silencioso vals que él mismo tocaba. Sonrió y caminó por el borde de la pared sin dejar de contemplar aquella calma que acunaba los sentidos. Se permitió cerrar los ojos unos instantes. Respiró por los oídos aquella inmensidad rítmica, acompasada, que opacaba incluso el lejano retumbar de los truenos.
El frescor de una gota al chocar contra la piel de su brazo la sobresaltó y abrió los ojos. Se dio la vuelta y contempló desanimada el zarzal que tendría que atravesar de nuevo para regresar a su hogar.
Inconscientemente, echó una mirada atrás.

Cita célebre

"Nada suena tan estridente a los oídos del autor como el silencio de la crítica"

miércoles, 7 de mayo de 2008

Anécdotas Históricas: Lo que no te cuentan de Bannockburn


Templarios.
Los Caballeros Jedi del Medievo (¿Alguien sigue pensando que George Lucas es una persona original y con imaginación?).
El viernes 13 de Octubre de 1307, la Orden de los Pobres Caballeros de Cristo, como se les conocía oficialmente, fue disuelta por orden del Papa y sus miembros fueron perseguidos, ajusticiados y masacrados por reyes de toda Europa. Los poderes humanos de por aquel entonces intentaron borrar toda constancia de la existencia templaria de la Historia, pero la presencia de este grupo estaba tan grabada en el imaginario popular que fue prácticamente imposible. Las leyendas de sus tesoros son conocidas por todos nosotros: el Arca de la Alianza, la Mesa de Salomón, el Santo Grial, la Cabeza de Juan el Bautista (que se comenta que era la reliquia más venerada por los Caballeros)… Además del gran enigma náutico que supone la desaparición de su flota de barcos, una de las más grandes del mundo… que desapareció de la totalidad de los puertos europeos la noche antes de la orden de búsqueda y captura papal y nunca más se supo de ella.

Pero además de toda la parafernalia mitológica extraída de la Orden del Temple, existen otras leyendas más históricas que fantásticas, leyendas que para algunos expertos dejan de serlo para convertirse en puros hechos documentados… aunque bastante poco documentados.
Una de ellas es la que habla de que solo un par de años después del fatídico Viernes 13, unos extraños jinetes blancos surgían de los bosques suizos para socorrer a los campesinos en apuros, desapareciendo luego sin dejar rastro.
Otra cuenta como los caminos de toda Europa se llenaron de mendigos armados y vagabundos que aparecían y desaparecían cuando en una aldea se solucionaba un problema.
Pero de las historias y fabulas que se cuentan sobre el destino final de los Templarios, podría ser la más comentada y espectacular la que ata la mágica Orden a las tierras de Escocia.

Cuando Robert the Bruce, inspirado en las hazañas de Sir William Wallace, involucró a la nobleza escocesa en la guerra de independencia contra Inglaterra, fue excomulgado por el Papa Clemente, sentencia que luego aplicaría a los nobles que lo siguieran a los campos de batalla y que finalmente fue aplicada a la totalidad del territorio y población de Escocia. Los historiadores creen firmemente que parte (o su totalidad) de la desaparecida flota templaria amarró en algún lugar cerca de Inverness por esas fechas, amparada por una nación emergente que tampoco tenía una estima muy fuerte hacia la misma Santa Iglesia que los había abandonado por intereses políticos. Así, un gran número de templarios se mezclaron con los clanes escoceses y desaparecieron del mapa histórico.
Hasta el 24 de Junio de 1314.
Ese día, Robert the Bruce comandó al ejército de Escocia contra los ingleses en la famosa batalla de Bannockburn. Una victoria más que cantada para Eduardo II, pero que fue un triunfo apoteósico para los norteños, acentuado por el hecho de que aquel día 6.500 montañeros derrotaron a 20.000 soldados invasores.
Sin embargo, pocas veces se ha dicho, pese a que hoy en día los escoceses están orgullosos de ello, que sus antepasados tuvieron una ayuda extra: un grupo de unos 200 jinetes acorazados Templarios arremetieron contra el flanco de la infantería inglesa, como agradecimiento y honra al pueblo que los había acogido.

martes, 6 de mayo de 2008

Caricias

Hoy, martes 6 de mayo, os hablaré de una de las mejores cosas que tienen las relaciones de pareja –o de trío, o cuarteto, o…- Son de esas cosas que relajan y ayudan a descansar –no, no es un polvo, panda de depravaos- de esas que hacen que las relaciones afectivas se estrechen un poco más –¡¡¡omitid la coña del sexo oral u os decapito!!!- Es el maravilloso manual de caricias. Puesto que puede que esto lo lean personas menores de edad, estoy obligado a censurar parte de ellas, pero como espero que los mayores de edad, ya sabréis darlas en las zonas que no aparezcan, no es necesario que las incluya…

Hay que dejar claro que una caricia es casi rozar con una parte del cuerpo –preferentemente manos o dedos, otras zonas huelen mal o no son enseñables en la calle, e incluso ambas cosas- usease, no espachurréis, no apretujéis como si fuerais a exprimir la zona acariciada, pues eso ya no es agradable, ergo pierde su relevancia.






Cabellos
El estímulo del cuero cabelludo produce un relax muy placentero al comienzo de la relación. (Aviso para navegantes: Si acaba demasiado a gusto, puede quedarse sobad@ en el hombro de la pareja)

Orejas El lóbulo de la oreja, la cavidad del pabellón auricular y la zona de detrás de la oreja aumentan su sensibilidad durante la excitación sexual, pero también como prólogo resultan muy sensibles a la estimulación oral (Aviso para navegantes –a partir de ahora, AVN- Como no sea prólogo, y se deje con las ganas, veréis un mosqueo –o calentón…)

Ojos Los nervios parasimpáticos de los párpados pueden ser estimulados con algunos besos suaves sobre los ojos cerrados, produciendo una relajación que hace más sensible la relación (AVN: No hagáis succión. Pase lo que pase, no succionéis el ojo, o acaba en la boca)

Boca y lengua La sensibilidad de los labios aumenta con la excitación haciéndolos muy sensibles al roce y la caricia de otros labios. La lengua permite un juego activo con las diferentes zonas del cuerpo (AVN: No problem, be happy)

Nuca, cuello y hombros Con las manos o la boca se pueden estimular estas zonas de especial sensibilidad produciendo los placenteros escalofríos (AVN: Hay chicas a las que los escalofríos no les parecen placenteros… un cabezazo puede surcar el cielo –no te lo darán adrede, pero será un gesto automático al encoger la cabeza)

Zona axilar y cara interna del antebrazo La estimulación manual suave resulta placentera en esta zona, pero siempre que se evite producir cosquillas. Como extensión de la línea mamaria requiere una estimulación muy suave (AVN: Zona axilar diferente de cosquillas en el sobaco, eso no es una caricia agradable, es una cabronada)

Dedos Su receptividad nerviosa es utilizada continuamente para sentir las texturas, formas y rugosidades de las cosas. Esta sensibilidad los convierte en un medio muy adecuado para sentir el cuerpo de la pareja.

Parte interna del codo De carácter secundario y muy lento tiene utilidad en combinación con otras zonas, pero no de forma independiente.

Cintura y cadera Acariciando suavemente toda la superficie de estas partes se produce una estimulación suave que puede combinarse con otras de mayor intensidad.

Espalda A los lados de la columna vertebral se localizan una serie de nervios que pueden estimularse de forma muy efectiva por medio oral o manual, siempre en sentido ascendente o descendente. Frente al hueso sacro existe una zona más sensible que el resto.

lunes, 5 de mayo de 2008

¿Quién mató a Mijail Dostoievsky?


Casualmente topé el otro día con una biografía del gran escritor universal Fiodor Dostoievski. Como siempre, las anécdotas con un tono trágico suelen atraer mi atención y aprovecharé para plantear alguna de mis retorcidas divagaciones.

El padre del escritor, Mijail Dostoievsky, era un hidalgo ruso de carácter rígido y autoritario, que a la muerte de su mujer en 1837, se sumió en la depresión y en el alcoholismo. Como consecuencia, Fíodor y sus hermanos partieron hacia San Petersburgo para ser ingresados en la Escuela de Ingenieros Militares. Dos años más tarde, el por entonces joven escritor recibía una carta en la que se escribía con letras lo que él había llegado a desear en muchas ocasiones: el fallecimiento de su padre. Se decía que habían sido sus propios siervos mancomunados quienes, hartos de los brutales arranques de violencia derivados de su afición a la bebida, lo habían atado y obligado a beber vodka hasta ahogarse.
Las lenguas más susceptibles dicen que ésta no fue si no la morbosa versión que extendió un terrateniente como arma de especulación para conseguir reducir el precio de la finca del fallecido.

Cuestiones capitalistas a un lado, el caso es que ante la muerte de la sangre a veces salen a relucir los verdaderos sentimientos, y nuestro novicio novelista pasó del desprecio a la culpabilidad más agonizante que puede existir: aquella que aparece cuando todas las puertas para huir de ella se han cerrado ya.
Incluso Freud, insaciable de aprovechar cualquier devaneo de las mentes e inquietudes humanas, escribió un tratado sobre el caso titulado Dostoievsky, el parricida.

Compadeciendo el tormento que el escritor tuvo que padecer a lo largo de su vida por cargar con una culpa que no debería otorgarse si no quizá, al destino caprichoso, yo me pregunto si un hombre que emprende una frenética caída durante dos años en los brazos del alcohol, un hombre derrotado por sus propios principios y desesperado por la falta de la luz que iluminaba las tormentas que su mismo carácter provocaba, un hombre abandonado por los hijos a los que él mismo ahuyentó… ¿acaso no lo habría matado la soledad?

domingo, 4 de mayo de 2008

Para una dama especial.


Primer domingo de mayo. En España, junto dos o tres países más, se ha elegido esta fecha para rendir homenaje a la persona con la que algún día compartimos el lecho más estrecho durante nueve eternos meses. La impulsadora inicial del día de la Madre fue una estadounidense, Anna Jarvis, quien perdió a su madre prematuramente y consiguió que en 1914, el Congreso de los Estados Unidos aprobara el Segundo domingo de Mayo como celebración oficial del Día de la Madre, y fiesta nacional en el país. Enseguida otros cuarenta países se sumaron al americano, pero lo que en principio Anna había concebido como una honra a la labor de todas las madres se convirtió poco a poco en una fiebre mercantilista que hoy en día sigue bombardeando la vista con los reclamos comerciales. Así, la propia Jarvis se volvió contra su propuesta y murió tratando de revocar aquello que ella misma había conseguido.



Después de esta pequeña introducción histórica una se pregunta si hoy en día podría establecerse alguna celebración cuyo noble principio no fuera manchado por las sucias manos del marketing capitalista. Sin entrar en estos detalles voy a permitirme reflexionar sobre esas pequeñas cosas que hacen que mi madre se merezca hoy que la mimen un poco más:

Por mucho que un padre suene como el “cabeza de familia”, algo rotundo e imponente, cuando mamá entra en casa es su estado de ánimo el que manda. Si su cara está tensa, automáticamente al resto se nos atenazan los nervios. “¿Qué habremos hecho? ¿Quién se la cargará hoy? ¡Mierda, no eché la ropa a secar!” Son algunas de las frases fugaces que se te pasan por la mente como un tren a toda velocidad. Sin embargo, si cuando abre la puerta, te saluda con una sonrisa… esa sonrisa. Esa sonrisa que es más cálida con los años, que no te contagia una carcajada, pero que por dentro algo se te relaja sólo con mirarla. Esa sonrisa por la que valen la pena muchas lavadoras sin tender.

Otra virtud que tiene mi madre, no sé si las vuestras también, es cuánto le duran las cosas. Al que más al que menos, la nueva camiseta super fachion que se compró el otro día en Zara le durará un par de meses, eso si no se deshilacha antes o si los requerimientos de imagen y moda actuales no hacen desecharla antes de que le salgan bolitas. En cambio, en su armario la ropa parece no tener fecha de caducidad. Mientras los pantalones no le tengan aire acondicionado de ese que surge con el tiempo, ella seguirá reservando las estrenas para mi armario y el de mi hermano. Eso sí, cuando por fin la ocasión la obliga y se ve obligada a sacar su mejor traje a relucir y arreglarse, ya puedes llevar puesto el mejor traje de marca, que estés lo guapa que estés, ella siempre te parecerá más bonita.

Y hablando de ropa, ¿¿¿Cómo diablos hace para distinguir cuales son los calcetines de mi hermano y cuales los de mi padre??? Esa capacidad sólo la pueden tener las madres. Yo no lo entiendo. Son iguales, de esos que vienen en pack de cinco… mismo tamaño y todo. Pues ella sabe cuáles son de cada uno.

Otra cosa de la que intento aprender, pero me cuesta, es su capacidad de organización. Trabaja a jornada completa fuera de casa prácticamente de lunes a domingo, en un trabajo no muy relajado que se diga. Este caso en particular ha sido bendecido con un marido y un hijo algo vagos que hacen el enorme esfuerzo de hacer la cena si ella no está. Eso sí, la comida se la deja ella hecha la noche anterior. Aún así, en el armario la ropa aparece diariamente lavada y planchada y la cocina recogida. Además es capaz de llevar toda la economía de la casa al día, controlar que mi hermano se acuerde de ir a sus citas, seguir mis enfermedades regularmente aún a doscientos cincuenta kilómetros de distancia, vigilar las plantitas de lo que intenta desesperadamente que se parezca a un jardín y lo mejor de todo…¡duerme!

Hay algo que hace que al final, acabes acudiendo a ella. Puede ser con una bronca, con una crítica, con un consejo o con una felicitación, pero sea con lo que sea consigue tranquilizarte. No sé si los científicos darían alguna explicación técnica de algún compuesto que se liberó cuando estábamos en el vientre, pero sea lo que sea, funciona. Hay cosas que un amigo comparte contigo, pero que cuando las compartes con tu madre aunque la solución no aparezca, el problema parece reducirse de tamaño por momentos.

Otra virtud que tienen las madres es la de decir cosas con el silencio. Tienen caras para todo. Con una sola mueca pueden estar diciéndote: “Yo no lo haría, Mejor que no lo hagas, Más te vale que no lo hagas, Prepárate cómo lo hagas”. Eso, si te dicen algo. Porque, ¡ay! ¡cuando deciden aplicar la ley del silencio! Esa tortura debieron de emplearla ya los romanos en el siglo quinto. Cuando pasas la barrera de los cinco días soportando la incertidumbre del qué habré hecho, la ausencia cortante de palabras durante las comidas, las bolas de hierba seca rodando por el desierto cada vez que os cruzáis por el pasillo mientras suena La muerte tenía un precio… ¡suplicas que vuelva al tradicional castigo de la zapatilla!

Por estas y por muchas otras pequeñas cosas que mi hambrienta mente de un domingo lejos de la comida y los mimos de mamá provocan que me olvide de mencionar, hoy quiero rendir un homenaje con un poco de humor a las madres. No a las madres en general, porque por desgracia se dan unos pocos casos en los que tales mujeres no merecerían llevar ese nombre.


Este recuerdo humilde va para aquellas que hacen que los hijos nos sintamos protegidos al mencionar su nombre, que pase lo que pase, y nos falle quien nos falle, su figura siempre va a estar ahí para hacernos unas lentejillas y prepararnos la bolsa de agua caliente para los pies si tenemos frío. Y también para las que no se pueden permitir esos detalles porque no disponen de los recursos, y tienen que demostrar a sus hijos qué significa ser madre luchando por mantenerlos vivos saltándose la ley si es preciso.



A las madres y a los hijos que disfrutamos de ellas, ¡feliz día de la Madre!


sábado, 3 de mayo de 2008

Gata perdida.


Llegó como llegan las mareas, con brisas cálidas. Me dijo que me regalaba algo que era demasiado frágil, que no quería que acabara hecho pequeñas esquirlas, pero a la vez, que no quería que el mío pudiera acabar igual. Yo dejé escapar una sonrisa, demasiados palos había recibido un ajado corazón como el mío, para que no me atreviera a deleitarme con la miel del amor, aunque fuera una ultima vez. Y acepté un contrato firmado con besos y abrazos. Descubrí de nuevo el gran hueco donde se puede reposar la cabeza y el aroma envolvente de las damas.

Por instantes, dejo de ser humo y sombras, para redescubrir secretos que quedaron olvidados. Todo por un ella. Por el “ella” de la mejor de las historias. La que se vive. Y aunque quizás mañana ella siga su camino. O no seamos el uno lo que buscaba el otro. Aunque la palabra amor, se convierta en olvido o peor, en rutina. Por una vez, parece que la diosa Fortuna me ha sonreído levemente para dejarme en mi camino el regalo de una gata de piel morena y ojos pardos.

Hoy el sol brilla con más fuerza. Mañana, ¡quién sabrá!